Nuestros 5 imprescindibles

Belleza colorista

Hay tanto por ver en esta antigua ciudad medieval que no sabrá por dónde empezar... No se puede perder por nada del mundo la visita a la catedral que se alza en el corazón de la ciudad y su bóveda gótica de 23 metros (la más ancha del mundo, ¡solo eso!). ¡Con el tique entrada también podrá acceder a la basílica y al museo para ver 2 exposiciones que merecen una visita! Un consejo, no olvide pedir la audioguía que está incluida en el precio de la entrada.

A continuación, tome las estrechas callejuelas del casco antiguo que le llevarán hasta la muralla para comenzar un espectacular paseo por el camino de ronda. ¡Mantenga los ojos bien abiertos porque las vistas son increíbles! Termine la excursión con una pausa relajante en los baños árabes. A falta de poder bañarse, puede visitar esta estructura que se remonta al año 1194 y, en particular, la piscina octogonal que no ha sufrido los estragos del tiempo.

Siguiendo los pasos de Dalí

¿Está preparado para un viaje extraordinario al universo explosivo del artista español? Visita al teatro del Museo de Figueres, ciudad de nacimiento de Salvador Dalí. Este imponente edificio rojo, coronado por huevos gigantes, impresiona tanto como intriga. Este castillo, que alberga las obras de Dalí, se ha convertido en una visita imprescindible tanto para los incondicionales como para los neófitos.

Le aconsejamos que reserve previamente la entrada para evitar las largas colas de espera. Una vez dentro del castillo no hay sentido de la visita, cada uno deambula a su ritmo por las diferentes salas, admirando las pinturas, esculturas, fotografías y collages que son a la vez mágicos y psicodélicos... Un pequeño inconveniente: hay pocas explicaciones sobre las obras expuestas... ¡así que deje volar su imaginación!

Rumbo al Caribe

Si sueña con un entorno paradisíaco, las playas de la Costa Brava le prometen un momento de relajación y evasión en unas aguas cálidas y cristalinas. Entre los acantilados, descubrirá numerosas calas rodeadas de vegetación y accesibles por mar o por senderos acondicionados.

Entre los 3 primeros, descubra la playa del Golfet, situada al pie de los jardines de Cap Roig. Este rincón paradisíaco lejos de la ciudad le ofrece un paisaje idílico en medio de la roca y la vegetación. La playa de Illa Roja es probablemente una de las más conocidas por la imponente roca roja que terminó en la arena. Para los amantes del naturismo, sepa que una parte de esta playa está dedicada a esta práctica. En el pueblo de Cadaqués, deje la toalla en una de las playas rocosas de la bahía, frente a los barcos de pesca y rodeado de esas típicas casas blancas.

Paisajes de postal

No se puede pasar por la Costa Brava sin recorrer este camino de ronda de 140 km de longitud que une Portbou con Blanes y que en su día fue utilizado por predicadores y contrabandistas. Hoy en día, este sendero, totalmente dedicado a los peatones, le ofrece un maravilloso recorrido que domina la orilla del litoral. Las múltiples entradas al sendero permiten disfrutar de un paseo de un día o de una excursión semanal.

Algunas partes han sido acondicionadas con espacios para sentarse y protegerse del sol. Sobre todo, anímese a curiosear contemplando las magníficas propiedades a la orilla de las rocas. Más abajo del sendero, descubrirá muchas calas salvajes pero accesibles, así que no olvide llevarse las gafas y el tubo para practicar esnórquel en el Mediterráneo.

La dificultad de elegir

No puede irse de la Costa Brava sin probar una de las numerosas especialidades locales. Empiece saboreando algunas tapas tomando un vaso de sangría: jamón ibérico, chipirones, anchoas, tortilla, pan con tomate... ¡hay que probarlo todo! Para disfrutar de un plato típico de la región, pida una paella con tinta de sepia o una fideuá, una famosa receta de pescador hecha con fideos, alioli y gambas. ¡Una auténtica delicia!

¡No te salte el postre! Nos vemos en el mercado cubierto de Rosas, junto a los puestos de fruta fresca para disfrutar de un cucurucho de churros acompañados por un chocolate caliente muy cremoso.

Una ventaja más

Bajo el sol

En la Costa Brava no hay ninguna posibilidad de pasar frío ni de que llueva a cántaros: con una temperatura media anual de 17° y 2.500 horas de sol al año, ¡el calor y el buen tiempo están asegurados!

La Costa Brava es:

200lugareshistóricos
199playasparadisíacas
256kilómetrosde litoral

¿Y si fuera su próximoMejor recuerdo de vacaciones?