Destino:Las Gargantas del Verdón

El pueblo más bonito de Francia

En el cruce de las gargantas del Verdon y la Ruta de la Lavanda, el pintoresco pueblo de Moustier Ste Marie está construido en torno a callejuelas bulliciosas y casas con carácter, alojadas en la hendidura de una roca. Conocido en todo el mundo por su producción de loza de increíble finura y sus adornos singulares, todavía existen algunos talleres dedicados a la creación de estos objetos únicos. No dude en visitar el Museo de la Faïence para descubrir los secretos de fabricación de este arte ancestral.

(Museo: precio 3€ /2€ / gratuito para menores hasta 16 años. Para más información haga clic aquí.

Para abrirle el apetito

¿Un poco de hambre? ¡Viene a pedir de boca! Durante su estancia en el sur, descubra las soleadas y sabrosas especialidades de la cocina provenzal. Comience su comida con unas tostadas de tapenade o alioli acompañadas de una deliciosa ratatouille. De postre, déjese tentar por un pedazo de tarta tropézienne. Por supuesto, no olvide acompañar su festín con una copa de Côte de Provence, preferiblemente rosado. Le aconsejamos que se detenga en el restaurante Le Comptoir en Ste Croix du Verdon: siéntese en la terraza y disfrute de unas vistas panorámicas excepcionales al lago de Ste Croix. En el menú, podr�� saborear unos buñuelos de calabacín caseros, un entrecot a la plancha aromatizado con tomillo, crema catalana quemada, en fin... ¡mucho para deleitarse! Reservas en el 04 92 73 74 62.

Una, dos, tres ¡reme!

Si le apetece practicar un poco de deporte durante las vacaciones, le ofrecemos una salida que combina entretenimiento y placer visual. Remonte 2 km por las Gargantas del Verdon, en canoa-kayak, patín de pedales o barco eléctrico: mantenga los ojos abiertos para admirar el trabajo de las eras geológicas en los acantilados. No lo dude y vaya a saludar a Nicolás del centro de ocio Sport and Nature. Le propondrá distintas excursiones de rafting o canoa por las agua vivas del Verdon. ¡Se lo recomendamos mucho!

¡Al agua, grumete!

¡Por supuesto que uno puede bañarse en unas aguas transparentes en Francia! El lago Ste Croix se ha hecho famoso en toda Francia por la belleza de su color azul turquesa y su entorno natural. No puede perderse pasar una tarde de descanso al pie del pueblo de Bauduen. Esta playa de guijarros blancos atrae a los veraneantes que pueden disfrutar del baño, bajo la mirada de los socorristas En verano, las aguas del lago pueden alcanzar los 27°, ¡así que no olvide los flotadores y corra a visitar este rincón paradisíaco!

El País de la Lavanda

La meseta de Valensole deslumbra a los curiosos de la zona por la variedad de colores a lo largo de las estaciones: las montañas nevadas de los Alpes dan paso a múltiples tonos de malva a partir de julio. Con más de 800 km² dedicados al cultivo de lavanda y los cereales, estos increíbles paisajes han dado fama a Valensole. Cierre los ojos y déjese transportar por esos aromas embrujadores y únicos. Un consejo, anímese a adentrarse por los pequeños y escarpados senderos para tomar fotografías del pueblo con estas impresionantes extensiones de lavanda como telón de fondo.